top of page

Bailando se visualiza a la música

  • Foto del escritor: Lilly Reiss
    Lilly Reiss
  • 3 jun 2017
  • 1 Min. de lectura

Dicen que la expresión más auténtica de un pueblo está en sus danzas y su música.

El cuerpo es el sagrado instrumento de la danza hecho del mismo material que el arte, de fibras sensibles, belleza, perfección y energía.

Es amarse desde la punta de los pies hasta la cabeza, acariciándose en la embriagues del movimiento, trasmitiendo esa conexión mágica entre la esencia y la desnudes del ritmo. Es abrazar el equilibrio entre alma y el cuerpo.

Reconocer esa gran pasión como para abandonar en los camerinos a la razón, cuando la disciplina nos hace sangrar.

Es mantenerse en constante evolución conspirando con el oleaje del mar.

Contando historias, ideas, sentimientos. Cuando uno baila trasciende, llega a tocar la gloria, a la libertad, a la poesía. Se codea con la fragilidad, con el instante eterno, con el destello de la fantasía.

El cuerpo entero expresa su frenesí y se es, absolutamente feliz. Es alborotar a los espacios que entusiasmados se deleitan con el "El pájaro de fuego" de Stravinsky, "Romeo y Julieta" de Prokofiev, es conmemorar a Pina Bausch pionera en la danza contemporánea.

Sócrates aprendió a bailar a los 70 años porque sentía que una parte esencial de él mismo había sido descuidada. Bailar es vida, es visualizar a la música.

“El alma del filósofo habita en su cabeza; el alma del poeta, en su corazón; el alma del cantante reside en su garganta. Pero el alma de la bailarina, tiene su morada en todo su cuerpo” Gibran Khalil Gibran, poeta.

Comments


FOLLOW ME

  • Black Facebook Icon
  • Black Twitter Icon
  • Black Instagram Icon
  • Black Pinterest Icon
  • Black YouTube Icon

STAY UPDATED

POPULAR POSTS

TAGS

  • White Facebook Icon
  • White Instagram Icon
  • White YouTube Icon

© 2017 by Claudia Pozo . Editado en Wix.com

bottom of page